"Facebook
ofrece una manera divertida de mantenerse en contacto con los amigos, pero
también tropieza con un ideal de delgadez que aumenta el riesgo de tener
trastornos de alimentación", dijo Pamela Keel, profesora de psicología en
la Universidad Estatal de Florida.
1.000 estudiantes
universitarias participaron en una prueba organizada por el grupo de Keel. Se
les preguntó cuánto tiempo pasaban en Facebook y si presentaban trastornos de
alimentación. En la segunda etapa del estudio los psicólogos estudiaron el
comportamiento de la parte de este grupo más activa en las redes sociales, y de
un grupo de participantes al azar.
El grupo de las
jóvenes más activas tenían un mayor riesgo de desarrollar un trastorno
psicológico. Estas mujeres eran también más propensas a valorar los comentarios
y los 'me gusta' en sus estados de Facebook como importantes, excluirse de las
fotos en la red social, y eran más propensas a comparar sus fotos con las de
sus amigas.
En cambio, el grupo
de participantes al azar que pasaron 20 minutos en Wikipedia buscando
información sobre los ocelotes, un felino tropical, y viendo un video de
YouTube sobre estos animales, era más propenso a reportar una disminución en la
preocupación por su peso después del estudio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario